EL PANETONE

 Las cosas tan ricas que tenemos en nuestros hogares para comer en estos tiempos nos hacen un poco más felices, buena falta nos hace. Unas castañas asadas, unas buenas papas de maiz escalentau, manzanas asadas de nuestra propia pomarada, avellanas bien torradas que no puedes parar de comer. Si sales un poco de casa la temporada de callos ya empezó en muchos restaurantes, una gran declicia.

No podemos renunciar a grandes inventos venidos de otros lugares, en mi casa tanto yo mismo como mi mujer todos los años hacemos la inuguración de los chambeos de esta época con algún panetone, que cosa tan rica, venidos posiblemente de europa, están deliciosos y no se puede renunciar a comerlos al menos un par de veces, bien mojado en café se pone uno como el quico a comer este rico bizcocho. Los panetones los hay de pastelería de alto standing, pero no nos hace falta tal manjar, con uno normalido del supermercado tambien nos apañamos. Ayer cuan mi esposa vió que entre la compra estaba el panetone me dicia "no puede ser" y es por que le gusta tanto que esta mañana a buen seguro ya empezado por mi mismo le dará un buen repaso.

Todas estas cosas las comemos dos o tres veces, igual que la cabeza de cerdo o "caramiecha" pero lo hacemos todos los años. Este año con las limitaciones propias de la pandemia la mayoría de estos majares se van a casa. Observó que lo que antes era una excepción ahora ya es una generalidad y todos o casi todos los lugares de comida tienen para llevar a casa, esto me parece muy bien, si tienes alguna persona con riesgo puede disfrutar de cosas diferentes, una manera de alegrarles un poco la vida, que bien merecido lo tienen.

Saben todos mis seguidores que aprecio los días normales, vengo desde hace años intentando que la gente se de cuenta de que son los más importantes, ahora que quieren que les cuente, todos esperamos esa normalidad que no será "nueva normalidad" será encontrar la que hemos perdido.

SALUD Y SUERTE